Los incendios forestales son, por su propia naturaleza, difíciles de predecir y controlar. Su extinción es una tarea formidable.

Waterbulbs, nace de la observación de cómo funcionan los clásicos rociadores y el comportamiento del agua al colocar una cuchara debajo del grifo.

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La adaptación de la idea hace que los Waterbulbs funcionen de forma eficaz y pasiva integrándose en el paisaje. Su estructura metálica que busca asemejar los troncos de los árboles contienen el agua a través de una estructura cónica metálica. En la punta, se encuentra una membrana especial resistente al vandalismo pero que se desintegra ante las altas temperaturas provocadas por los incendios forestales, dejando escapar el agua. En su parte inferior reposa un plato en forma de cuchara que al caer el agua golpea y da lugar al efecto de cúpula del agua. Esto cubriría un radio que podrá ser capaz de extinguir el fuego.

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Al ser una respuesta pasiva al control de incendios, el impacto económico y ambiental es altamente positivo, ya que el dispositivo ofrecería la posibilidad de reducir el fuego en menos tiempo, haciendo que las fuerzas de seguridad minimicen el gasto de recursos.

La presencia etérea de estos seres artificiales en el paisaje hace que con el tiempo se conviertan en parte de él. Incluso algunos animales como los pájaros podrán usar el contenedor como estanques elevados sobre el bosque.

Los incendios forestales son parte del ecosistema debido al cambio climático, por lo que debemos empezar a pensar en posibles soluciones para proteger nuestros bosques, necesitamos pensar en una arquitectura que combata el fuego.